Pintora. Su trayectoria está adscrita a la figuración y, aunque aparentemente representa la realidad, su obra es el resultado de una investigación atenta a lo que capta su mirada a través de la observación directa del motivo para acabar plasmando la duda y el misterio. Los temas predominantes – telas, piedras, hojas, flores- y objetos habitualmente condenados a un papel secundario de la composición, pasan aquí a ocupar el primer plano. Con esta estrategia consigue dar el verdadero protagonismo al color, el principal aliado de su lenguaje artístico.