Este es un trabajo realizado en la ciudad de Dubai, un lugar curioso, con una historia muy reciente, sin pasado, sin memoria. Una ciudad erigida en mitad del desierto a la que se le trata de dar una imagen, mediante el extremismo arquitectónico, con el edificio más alto del mundo, las islas del mundo, y excesos de todo tipo. Pero, así como los americanos ya hace mucho tiempo que comenzaron a utilizar las representaciones históricas en los parques temáticos, lugares fundamentalmente europeos, en Dubai se empieza ahora a crear la imagen de la ciudad entera basado en lo mismo. Un centro comercial rodeado por la reproducción de la muralla de Ávila, y que en su interior podemos encontrar la fuente de los leones de la Alambra. Incluso en la construcción de zonas residenciales aparece el fenómeno: zonas urbanas con barrios con nombres de países: Francia, España, Italia,… pasan a ser un producto, una marca, un valor añadido.