Fue un importante estudio de fotografía en las Ramblas de Barcelona en el que trabajaban 10 profesionales entre iluminadores, fotógrafos y retocadores. José Mª Cirés fue el alma del estudio hasta el final.
Actualmente solo quedan 1.300 negativos de los 200.000 o 300.000 que el estudio llegó a tener. Las fotografías estaban destinadas a la promoción de profesionales del mundo del espectáculo: boxeadores, vedettes, circo, lucha libre, etc. Muchas de ellas formaban parte de programas de mano y carteles.
El conjunto de fotografías muestra la vida nocturna de Barcelona y son un fiel reflejo de la identidad de la época en que fueron realizadas.